Los animales de compañía
Como comento en Constelaciones Para Animales De Compañía, cuando un animal llega a nuestra vida es porque nos elegimos mutuamente para evolucionar juntos. Unas veces simplemente dándonos su amor incondicional nos ayudan a estar en contacto con la ternura, el amor y la alegría. Otras, a través de sus enfermedades y problemas, nos muestran algo que hemos olvidado pero que queda por sanar, puede ser un trauma de infancia, algo de nuestro sistema familiar o algo pendiente de una vida pasada. A veces el camino con un animal de compañía se repite en varias encarnaciones. También pueden mostrarnos algo que estamos haciendo mal en este momento de nuestra vida y que requiere de una mirada nueva. Nadie como ellos para conocernos. Si somos verdaderamente responsables de nuestro animal y somos capaces de ver sus necesidades más allá de lo meramente físico, nosotros también podemos ayudarlo en su evolución y nuevos aprendizajes. Actualmente hay nuevas herramientas para podar entender y sanar a nuestros animales. Una de ellas son las Constelaciones Familiares, pero también la Comunicación Animal, Registros Akásicos y otras. Hay que estar muy atentos a las señales que nos envían, en forma de enfermedades, accidentes, problemas de conducta, etc., exactamente igual que nosotros. Como ilustración, comparto la constelación de la perrita Hada a la que le lloraban mucho los ojos: El veterinario le practicó una desobstrucción del lacrimal pero no mejoró nada. En su opinión habría que operar y abrir más el lagrimal, dejando una cánula durante días para poderlo ensanchar, aunque tampoco aseguraban el éxito. La constelación muestra que en otra vida murió en un campo de batalla junto a su dueño. Era de esos perros que acompañan a los soldados. Había mucho polvo por todos lados y algo químico (posiblemente gases lacrimógenos). Estaba ciega y con mucho picor en los ojos, no sabía qué pasaba, murió en esa incertidumbre pegada a su compañero de entonces que había muerto también. Parte de su alma quedó retenida en ese hecho traumático. Con la constelación pudimos liberar e integrar esa parte de su alma y sanar la memoria que carga en su ADN. Pasados 15 días el lagrimeo cesó por completo hasta hoy, hace ya bastantes meses.Mª Milagros Estanislao Quintanilla
Consteladora y Coach Personal